Reivindicaciones y sostenibilidad en la noche del cine

Las luces del teatro Dolby se volvieron a encender y se extendió la alfombra roja. Este domingo llegó la 92ª edición de los Premios Oscar, un año lleno de sorpresas desde el éxito de Parásitos hasta la actuación de Gisela. Pero además de en la gran pantalla, los actores y actrices brillaron como nunca en la alfombra roja. Hubo todo tipo de piezas, todas cuidadas al detalle, aunque hubo invitados que no llegaron a acertar con su atuendo. 

Bordado de la capa de Natalie Portman. Getty Images 

Prestando atención precisamente al detalle está Natalie Portman. Una capa de Dior muy reivindicativa que contaba con los nombres de las mujeres directoras que no han sido reconocidas en los premios bordados en dorado. No es la primera vez que alza la voz para mostrar su desacuerdo con las discriminaciones de género en este tipo de premios y sin duda será algo que se recuerde como icónico y espectacular a partes iguales. Algo sutil en sus palabras que fue un acierto en mayúsculas, no solo por el mensaje, sino también por los colores, estampado, corte.

Natalie Portman vestida de Dior. Amy Sussman, Getty

En la alfombra roja también hubo espacio para la sostenibilidad. La recuperación de vestidos o reutilización de las telas. En este aspecto destacan Margot Robbie (nominada a mejor actriz de reparto por ‘Bombshell’) y Saoirse Ronan (nominada a mejor actriz por ‘Mujercitas’). La primera llevaba una pieza vintage de Chanel directo de la colección Haute Couture de primavera de 1994. Un diseño off-the-shoulder de seda azul marino cuyas mangas se encuentran separadas del cuerpo. Lo adornó con un broche al pecho también en tono azulado. La protagonista de ‘Mujercitas’, por otro lado vestía un vestido de Gucci violeta y negro. Una pieza nueva que incluía una tela reciclada del vestido negro que la actriz llevó en los premios BAFTA. Unos dramáticos volantes que no sólo contrastan con el color de la falda, sino que le aportan dimensión al traje.

Margot Robbie (izq.) y Saoirse Ronan (dcha). Amy Sussman, Getty

En este caso Robbie lo lució de una manera espectacular, simple pero efectivo con un maquillaje y un peinado que no le podía favorecer más. Ronan, en cambio para mí fue algo que no terminaba de convencer. El color es precioso, pero el corte y la forma del vestido es algo que para mí no termina de encajar, como si fuesen dos piezas inconexas.

En lo masculino la sostenibilidad llegó de la mano de Timothée Chalamet (actor de 'Mujercitas', 'Call Me By Your Name'...). Un toque diferente al habitual traje negro con pajarita que ha sido lo más visto entre los diferentes actores de la gala, el joven llevaba un traje azul marino de la colección sostenible Re-Nylon de Prada adornado con un broche de Cartier. De nuevo, un toque vintage que contrasta con la estructura moderna de la pieza que simula una bomber. Pero no se puede hablar de reutilización sin mencionar a Joaquin Phoenix al que de nuevo se le ha podido ver con el que asegura que es su único smoking de su armario. Vestido de Stella McCartney el actor es fiel a su filosofía ecologista y lanza un claro mensaje para promover la moda sostenible.

Ambos tienen una buena percha y es innegable. Chalamet fue muy criticado por esta elección, pero sinceramente, las alfombras rojas están para arriesgar, mostrar algo diferente y al sector masculino parece que se le olvida. Ese traje era una apuesta muy juvenil y elegante a partes iguales. Se le veía cómodo, en su estilo, mis dieces.

Timotheé Chalamet y Joaquin Phoenix. Steve Granitz, Getty

Florence Pugh vestida de Louis Vuitton. Steve Granitz, Getty

Una opción sorprendente fue el vestido de Florence Pugh (nominada a mejor actriz secundaria por ‘Mujercitas’). Un vestido aguamarina satinado de escote en pico, con cascada de volantes y bajo asimétrico de Louis Vuitton. Lo acompañó de mínimos accesorios y tacones de tiras del mismo color y no le podía sentar mejor. Claro ejemplo de que quien arriesga puede ganar. Algo espectacular que también ha sido muy criticado e incluso colocado en las listas de peores vestidos. Es innegable que la actriz pisa fuerte en cada evento ya que en esta temporada de alfombras rojas no ha parado de sorprender.

Gal Gadot vestida de Givenchy. Amy Sussman, Getty

Otra pieza indescriptible fue la de Gal Gadot (actriz que da vida a Wonder Woman, entre otros). Vestido bicolor negro y rosa de encaje de Alta Costura de Givenchy. Cuando digo indescriptible en este caso no lo digo en el buen sentido. Ella es preciosa y suele brillar en el photocall, pero en este caso ha patinado y sinceramente, no sé ni por donde coger este look. Los colores combinan entre sí, que no con el maquillaje, pero la estructura de vestido y tanta utilización de encaje, además de patrones diferentes… es un no rotundo.


Una mención especial que no podía faltar en este análisis es a las mujeres que dieron inicio a la gala cantando ‘Into the unknown’ (‘Mucho más allá’) de la película de animación Frozen 2. Cantantes espectaculares entre las que se encontraba la española Gisela, que salió de la primera edición de Operación Triunfo. Todas iban preciosas, con unos trajes coloridos y muy originales en la alfombra roja y totalmente coordinados en escena. Una actuación mágica sin duda.

Las mujeres que dan voz a Frozen en la alfombra roja. Robyn Beck, Getty

Hubo cientos de vestidos que llamaron la atención por las formas y accesorios, pero respecto al color predominó el blanco y el negro. Apuesta clásica y segura para una alfombra roja como esta, que al fin y al cabo, no es lo más importante de la noche. El cine es el verdadero protagonista y una vez más se pudo ver en una gala única. Sin duda 2019 fue el año del cine.

Itsaso Molinero Hernández